Pterigión: Una de las enfermedades visuales causadas por el sol
Pterigión es una enfermedad común en todo el mundo, su incidencia aumenta en las personas que se exponen con más frecuencia al sol. En países del caribe o las costas con clima tropical, donde inciden con mayor fuerza los rayos del sol, aumenta el riesgo de desarrollar pterigión, pinguécula y cáncer en la superficie ocular.
El Pterigión, también conocido como “Carnosidad en la parte blanca del ojo”, es un crecimiento de conjuntiva fibroso y vascularizado sobre la superficie de la córnea (lente anterior del ojo).
Los ojos son órganos que tenemos completamente expuestos al medio ambiente, es por esto que debemos protegerlos de los rayos ultravioleta, luz solar, polvo, brisa, traumas al practicar deportes, trabajos agrícolas, accidentes laborales y en el hogar, teniendo en cuenta el uso de lentes que nos protejan.
El pterigión presenta diversas molestias pero su principal característica es una carnosidad dentro el ojo, generalmente en su parte interna, estéticamente es indeseable para las personas que lo presentan. El paciente también presenta sensación de basuritas, ardor, ojos rojos, resequedad, esto debido a que la carnosidad no permite una lubricación adecuada de la superficie del ojo.
Para evitar cambios degenerativos en la conjuntiva, entre los que se incluyen pterigión y pinguécula, alergias, ojo seco y cáncer se recomienda usar gafas con verdadero filtro ultravioleta, ya que cada año se pierde el 1.2% de la capa de ozono y el 90% del daño de los rayos UV es ocasionado alrededor de los ojos. Proteger los ojos en condiciones secas o de excesivo polvo, utilizar lágrimas artificiales libres de persevantes en condiciones de resequedad, realizar exámenes específicos para diagnóstico de síndrome de ojo seco, son acciones que le permitirán prevenir estas enfermedades y condiciones que afectan la salud visual.
Cuando comienza a aparecer un pterigión es útil para el paciente protegerse del sol con lentes de buena calidad que lo protejan de la luz ultravioleta (tipo UV). Es conveniente asistir al médico oftalmólogo para un examen completo de sus ojos y así establecer si es necesario un tratamiento médico o quirúrgico.
Lo más importante es recordar que el pterigión es una lesión causada por el sol y debido a que la radiación ultravioleta tiene la capacidad de modificar el material genético de las células, muchas de estas lesiones pueden llegar a transformarse en cáncer, por lo que deben ser vigiladas de cerca por el médico oftalmólogo.